¿Qué tipos de humedades existen en la construcción? II PARTE

Siguiendo con el artículo de la semana pasada sobre los distintos tipos de humedades que pueden aparecer en un edificio y en el que ya hablamos de las Humedades de Obra, las originadas por el Medio Ambiente y las Accidentales, vamos a continuar describiéndolas:

Humedades por capilaridad

Aparecen cuando el agua se difunde o empapa el mortero, hormigón, cerámica, madera… o cualquier otra materia prima porosa empleada en la construcción del edificio. Se originan en el terreno en el que se haya levantado la construcción, subiendo la humedad por los capilares. Normalmente terminan evaporándose en el ambiente pero los muros quedan deteriorados.

Cuando surgen humedades por capilaridad suelen existir problemas de estanqueidad e impermeabilización de los muros de carga del edificio y sus pilares. Los minerales disueltos en el agua del subsuelo cristalizan al ir evaporándose y van sedimentándose en el enfoscado que se va deteriorando paulatinamente al mismo tiempo que la pintura que termina desconchándose.

Humedades por condensación

Normalmente surgen en baños o dormitorios que no están bien ventilados o aislados y en los que el agua se condensa. Varios factores pueden influir en su aparición:

• Mala regulación de la calefacción: El aire caliente provoca que la humedad del ambiente se evapore. Si en la vivienda se producen cambios de temperatura buscos, la probabilidad de que aparezcan este tipo de humedades, se incrementa.
• Falta de ventilación: Los pisos y casas de hoy en día están pensadas para mantener el frío o el calor dentro de ellas evitando fugas en los sistemas de climatización, sin embargo, esto tiene una contrapartida, que el aire del interior no se renueva.
• Mala climatización de las viviendas: Si el edificio no está bien aislado térmicamente, hay puntos clave por los que el frío puede provocar la condensación del vapor existente en le ambiente. Pasa sobretodo durante el invierno, en aquellos lugares en los que hay una temperatura baja en el exterior y por el contrario, hace calor dentro del edificio. Provoca daños en la habitabilidad de la vivienda y la aparición de moho que se va propagando por los techos o paredes.

Existe un tipo de humedad por condensación llamada intersticial que no es apreciable a simple vista porque se origina dentro de las paredes.

Nos quedaría por hablar de las humedades por filtración debidas a una impermeabilización deficiente, a defectos constructivos o al deterioro de las materias primas utilizadas en la construcción del edificio. Veremos este tipo de humedades en detalle la semana que viene.