Sea la construcción de una vivienda o la reforma de un cuarto de baño, es bastante habitual recibir la visita de clientes hartos de reclamar a la constructora contratada para que termine el trabajo por el que se le ha pagado. En muchos casos, hasta la totalidad del importe de la obra por adelantado, como es el caso que les cuento y que ha terminado con una condena al constructor y recuperación total de las cantidades reclamadas.
Es el caso de Julián e Isabel que decidieron hacerse su propia vivienda con una determinada empresa constructora a la que adelantaron una cantidad muy importante de dinero. La constructora empezó no yendo todos los días y no cumpliendo con los plazos de entrega. Por último, terminaron por desaparecer y hacer caso omiso de las llamadas de nuestros clientes. Llegados a este punto, recurrieron a nosotros para que le asesoráramos.
El primer paso fue enviar un burofax a la constructora para que quedara constancia fehaciente de que se le instaba a continuar con la construcción de la vivienda dándole un plazo de 10 días para reiniciar los trabajos y se les indicaba que se procedería a solicitar la resolución del contrato, así como que debían llevarse todas sus pertenencias de la obra.
Como la empresa hizo caso omiso al burofax enviado, instamos a nuestro cliente a que cambiara las llaves de entrada a la vivienda / obra, para “asegurarse la posesión” de la misma.
Como tampoco se habían llevado sus herramientas, le aconsejamos que las guardara para devolverlas a su dueño, llegado el momento.
Se solicitó a un perito que realizara un informe donde detallara:
- El estado de la obra.
- Los defectos encontrados, en caso de que los hubiera.
- Una valoración económica que contrastara los importes entregados con lo llevado a cabo en la realidad más los trabajos de reparación que fueran necesarios, es decir, el saldo de la obra que correspondería a nuestro cliente y que sería la cantidad que se reclamaría ante los tribunales.
Al mismo tiempo, recomendamos a nuestro cliente que levantara un “Acta de presencia notarial” con el fin de que un notario también “diera fe” del estado en que se encontraba la obra y se reforzara el dictamen pericial.
Finalmente, y cumplidos con los pasos anteriores, presentamos demanda civil frente a la constructora, solicitando la resolución del contrato y los importes a favor de nuestros clientes por las obras no ejecutadas y otros gastos, así como las costas del procedimiento.
Si usted también se encuentra en una situación similar, no espere más, póngase en contacto con nosotros y defenderemos sus intereses. En LOE Abogados somos expertos en defectos de construcción. Le atenderemos personalmente.